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Jesus Aivar

TECH TRANSFER TALKS

Jesús Aivar es Sales & Marketing Manager de LIDAX, una empresa de base tecnológica espacial, ubicada en Madrid.

Sus ingenieros desarrollan equipos ópticos que forman parte de los más avanzados instrumentos científicos que se embarcan en los satélites de la Agencia Espacial Europea, buscando dar respuestas a los grandes interrogantes del Universo, sobre la propia existencia humana, así como predecir mejor los fenómenos meteorológicos que se producen en la Tierra.

Debo empezar esta entrevista dándoos la enhorabuena. Creo que acabáis de firmar un contrato con la Agencia Espacial Europea, ¿verdad? ¿Podrías explicarnos en qué consiste?

Así es, hemos firmado un contrato “Proof of Concept”, lo que en términos ESA, es un contrato para transferir una tecnología espacial desarrollada para, mejorar el enfriamiento de equipos ópticos que funcionan en el espectro infrarrojo, a otras aplicaciones de índole terrestre. Se ha observado que esta misma tecnología tiene un gran potencial para ser adaptada en aplicaciones terrestres.

Se trata al uso de un interruptor, en este caso térmico, que funciona a muy bajas temperaturas, en el entorno de los -250ºC y que permite mejorar la eficiencia y operación de aquellos sistemas criogénicos que emplean helio4, uno de los gases nobles más escasos en la Tierra, y que por tanto tiene un coste elevadísimo. 

Su uso por tanto, dada su escasez, está muy restringido a aplicaciones de investigación y medicina, ya que se utiliza para criostatos o para el enfriamiento de imanes superconductores, presentes por ejemplo en máquinas de resonancia magnética en hospitales y centros de investigación básica. 

Tengo entendido que KIM, como bróker de la Agencia Espacial Europea en España, ha jugado un importante papel en este proceso.

Efectivamente fue KIM quien en su rol de bróker nos animó a presentarnos a esta licitación de la Agencia, abierta y muy competitiva, facilitándonos en todo momento la información necesaria y soporte para conocer cuáles eran los objetivos de la convocatoria. Fue una ayuda muy útil para saber cómo enfocar la propuesta.

¿Cuáles serán los grandes hitos de esta “Prueba de Concepto”? En otras palabras, ¿qué esperáis conseguir?

Bueno se trata de una actividad técnica muy intensiva, en la que en los próximos cuatro meses vamos a ensayar nuestro interruptor criogénico, en colaboración con el Laboratorio de Bajas Temperaturas de la Universidad Autónoma de Madrid

El objetivo de la “Prueba de Concepto” es demostrar con dicho interruptor criogénico que conseguimos una reducción significativa de la tasa de evaporación del He4 de forma que suponga un gran ahorro para el usuario de la instalación. El usuario final está acostumbrado a rellenarla periódicamente con He4 , pudiendo llegar dicho ahorro a varios miles de euros, asegurando unos niveles de eficiencia nunca vistos en criostatos o, cámaras de enfriamiento criogénico, con el beneficio que ello implica.

¿En qué fase del proyecto os encontráis?

Estamos, por un lado, en fase de identificación de beneficiarios de dicha tecnología como, fabricantes de criostatos y máquinas de resonancia magnética, a la vez que, diseñando y preparando la campaña de ensayos junto con la Universidad Autónoma de Madrid, para validar las prestaciones de dicho interruptor criogénico para estas aplicaciones terrestres. Somos muy optimistas en cuanto a los resultados de los ensayos, lo que nos permitirá demostrar las ventajas del producto a nuestros potenciales clientes.   

Si todo marcha según lo previsto, ¿qué posibles aplicaciones podría tener esta tecnología tanto en el ámbito space como non space?

Bueno en el ámbito Space ya hemos desarrollado un prototipo avanzado (CHS) acrónimo de Cryogenic Heat Switch, orientado a mejorar la eficiencia de los sistemas criogénicos embarcados en satélites. Estos sistemas llevan dos crio-enfriadores, uno nominal y otro redundante, por si falla el primero. 

Con este interruptor podemos aumentar la eficiencia de ambos, disminuyendo su potencia y con ello el consumo eléctrico, además de reducir su tamaño y su peso, tratando de que la masa sea lo mínima posible, lo cual siempre es necesario debido al elevado coste por kg en las cargas de pago del lanzador.

En el ámbito non Space, este interruptor térmico, puede emplearse en 3 aplicaciones:

  1. En cámaras de vacío criogénicas o, también llamados criostatos que incorporan un sistema de re-condensación de Helio4. Estos sistemas son mixtos, es decir, se denominan sistemas wet-dry (húmedo y seco) porque consisten en un baño de Helio 4 y un crio-enfriador. El interruptor reduciría el consumo de Helio.
  2. La segunda aplicación sería en estas mismas cámaras, en las que empleando un sistema de enfriamiento únicamente seco (solo crio-enfriador, sin baño de Helio) se pretende realizar medidas ultra-precisas. Aquí el interruptor podría proporcionar tiempo extra de medida a baja temperatura
  3. Y por último y no menos importante, en imanes superconductores los cuales emplean Helio4 para enfriarse, utilizándose en máquinas de resonancia magnética , espectrómetros de masas, aceleradores de partículas, etc.

¿En qué medida es distinto trabajar para un cliente como la Agencia Espacial Europea?

Bueno trabajar con la Agencia por un lado supone un plus de responsabilidad, pero a la vez te das cuenta de que el nivel técnico de nuestros ingenieros es excepcional y están muy valorados por los responsables de la ESA. 

He de decir al respecto que España actualmente es uno de los estados más activos en el desarrollo tecnológico para la Agencia y la cantidad de contratos que obtiene nuestra industria así lo atestigua. 

El apoyo institucional en cualquier caso de centros como el INTA u organismos públicos como CDTI y Ministerios involucrados sigue siendo fundamental para mantener y mejorar esta capacidad tecnológica nacional y que siga a la vanguardia internacional.    

Entiendo que esperáis que este proyecto suponga un punto de inflexión para vosotros a nivel comercial, técnico, etc., ¿verdad?

Efectivamente, nuestro objetivo es que este interruptor criogénico suponga una puerta de entrada a otros sectores y lo que originariamente fuera un componente desarrollado para espacio, pueda utilizarse en otros sectores de la ciencia e investigación médica en la que el beneficiario final, no puede ser otro, sea la sociedad en general.  

“Piensa qué puedes aportar y qué sabes hacer y lánzate a ello.” Porque al final lo que interesa es a qué necesidad puedes tú dar una solución de un modo más eficiente o agradable. De ahí han surgido cosas, por ejemplo, un smartphone no era una necesidad, pero era una manera más eficiente de utilizar un equipo.

Creo que ahí no es inventar por inventar, sino ver si hay una necesidad o un problema, e ir a por él si tú tienes una capacidad para dar una solución.

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